LOS HUEVOS DE LUCIO

Me está ocurriendo lo mismo que a la Sexta, que ha pasado del caviar y el champagne de las Mujeres Ricas al botellón y al bocata de las Princesas de Barrio.

No me han invitado a comer, pero gracias al llamamiento de la última entrada, esta semana puedo comentar algo digno por la colaboración desinteresada de la familia Torregrosa, ya que por mi parte, y no es broma, solamente podía comentaros las ¿divertidas? Burguers que nos ofrecieron en Xeraco.

Si amigos, hamburguesas tuneadas, lo nunca visto. Antes de salir del local le propuse al dueño nuevos formatos que podría incluir en la carta:

- Con cejas, burguer Zapatero.
- Con labios gruesos, burguer Carmen de Mairena.
- Con olivas negras, burguer Marujita Díaz.
- Con guarnición de huevos y longaniza, burguer Nacho Vidal.
- Con la boca muy abierta, burguer partenarie de Nacho Vidal.

Cambiamos de huevos. Mi estimada Sonia ha cogido el AVE con toda la familia y se ha marchado a los madriles, remitiéndome la crónica gastronómico social de la escapada, que os paso a resumir.

Cual famoso que se precie, es de obligada visita acudir a casa Lucio a degustar los famosos huevos, que se suponen frescos, no como la vajilla, el mobiliario, los clientes y el propio Lucio, que se han quedado en la época del paleolítico, con tufillo a rancio. Del local puedes salir con foto dedicada de Lucio por 20€. Lucio, te has lucido.

Recomendable la comida en el restaurante del Thyssen con el menú degustación y la posterior cena en Chueca en el restaurante la Divina (no le iban a poner el Machote), tanto por su diseño como por los platos que degustaron, ensalada de cecina con jamón y foie y de segundo hojaldre de ciervo.

Especial hincapié en recomendar el descubrimiento del mercado de San Miguel, un mercado precioso, con especialidades de vino, jamón, queso, ostras….., de lo que puedes pedir raciones para llevar o comértelas allí, todo ello rodeado de un ambiente muy chulo y agradable.

Bueno, ya veis la diferencia entre unas ¿divertidas o patéticas? burguers y un fin de semana, perdón, que te cagas, y del que se deduce el lema familiar, La familia Torregrosa si que gosa.
Los güevos más conocidos para mí hasta el momento eran los del sargento Arensivia.